Christopher Nolan dirigió en el año 2008 El Caballero Oscuro, continuación de Batman Begins. Aquí expande sus grandes cualidades y se abre totalmente en un lucimiento espectacular.
El choque que se produce entre Batman (Christian Bale) y el Joker (Heath Ledger) es brutal, ya que ambos se rigen por principios que les obligan a no acabar de forma voluntaria con el otro. Aquí Bruce Wayne es más humano y no puede permitirse dejar morir a los villanos, los necesita. En este punto, Joker es una bomba de relojería a punto de explotar, algo impredecible, como un accidente que puede suceder en cualquier momento.
El trabajo de Heath Ledger fue colosal, haciendo de un Joker llevado continuamente por una locura controlada, que le hacía ser enormemente peligroso. En una escena mítica va a ver a Harvey Dent (Aaron Eckhart), el alcalde que se ha quedado con medio rostro desfigurado por la explosión de gasolina cuando les secuestró el Joker, y que se recupera en el hospital. Allí le explica que basicamente él está hecho para provocar el caos, siendo él un agente del caos.
El trabajo de Heath Ledger fue colosal, haciendo de un Joker llevado continuamente por una locura controlada, que le hacía ser enormemente peligroso. En una escena mítica va a ver a Harvey Dent (Aaron Eckhart), el alcalde que se ha quedado con medio rostro desfigurado por la explosión de gasolina cuando les secuestró el Joker, y que se recupera en el hospital. Allí le explica que basicamente él está hecho para provocar el caos, siendo él un agente del caos.
Os dejo con la mítica escena.
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