jueves, 30 de junio de 2022

Bandas sonoras míticas del cine (CXII)

En 1997-1998 Philip Saville dirige Metroland, un film ambientado en 1977 y que protagonizan Christian Bale, Emily Watson y Lee Ross. El guión pertenece a Adrian Hodges, basado en la novela Metrolandia de Julian Barnes. El film trata de un treintañero Chris, cuya vida muy predecible y tranquila se ve interrumpida por una llamada telefónica de un amigo de juventud llamado Toni (Lee Ross) que está de vuelta en Inglaterra tras algunos años de vida errante como poeta viajando por África, Europa y Estados Unidos. Chris está casado con Marion (Emily Watson) y viven con su bebé Eastwood, en las afueras de Londres conocidas como Metroland (la ciudad dormitorio al final de la Línea de Metro Metropolitan de Londres).
Años atrás ambos amigos compartieron el sueño de escapar de la vida aletargada burguesa para vivir el esplendor de la vanguardia francesa de los 60. Este regreso de Toni desencadena en Chris un río de recuerdos sobre sus frenéticos años en el París del final de los sesenta.
Mark Knopfler escribió y produjo la banda sonora de Metroland, que se complementa con algunos cortes adicionales adecuados al período representado en el film como Francoise Hardy, Django Reinhardt, The Stranglers o Elvis Costello. Esta banda sonora no saldría editada hasta 1999, de hecho el guitarrista y compositor británico estaba enfrascado en ese momento con este trabajo y la banda sonora de Wag the dog que salió en 1998.


Os dejo con el tema Metroland que cierra la banda sonora en el que Knopfler canta, toca la guitarra y compone la canción.

miércoles, 29 de junio de 2022

Bandas sonoras míticas del cine (CXI)

Jerry Kawalerowicz dirige en 1971 Maddalena, una película italiana donde se cuenta la historia de una mujer morena llamada Maddalena (Lisa Gastoni), que quiere satisfacer sus deseos sexuales y termina haciendo dudar de su fe a un joven y apuesto párroco. Por otro lado, una mujer rubia y con el mismo nombre, se reúne con su marido (de quien busca únicamente la protección económica) y se aprovecha de que él está enamorado de ella, hasta tal punto que no le importa concederle el divorcio que pide, con la condición de que siga siendo su amante en lugar de su esposa, y continúe acostándose con él.
La película es sobre todo recordada por presentar por primera vez la obra musical "Chi Mai" de Ennio Morricone, que por supuesto hizo la banda sonora. Chi Mai es de esos temas que te dejan sin palabras, una joya atemporal.


Os dejo con Chi Mai.

martes, 28 de junio de 2022

Bandas sonoras míticas del cine (CX)


Giuseppe Tornatore, el autor entre otras de Cinema Paradiso, regresaba después de 5 años y lo hacía con una película pensada y calculada, y con un reparto de actores realmente excelente. Mención aparte merece Geoffrey Rush, un actor de esos que con el paso de los años ha adquirido un poso y una elegancia y profundidad en sus interpretaciones, que le hace estar entre lo mejor del cine. Virgil Oldman (Geoffrey Rush) es un hombre solitario, excéntrico, sibarita, y hasta algo misógino, experto en arte y agente de subastas, muy apreciado y estimado en todo el mundo del arte. Su vida transcurre sin mujeres, alejado de cualquier sentimiento afectivo, hasta que conoce a una misteriosa y hermosa joven Claire (Sylvia Hoeks) que le encarga tasar y vender las obras de arte heredadas de sus padres en una villa medio abandonada. La aparición de esa joven, que sufre una extraña enfermedad psicológica, hará que el hermetismo de Virgil desaparezca y hará que su vida se transforme para siempre.
Una falsificación tiene siempre algo verdadero en sí misma. Esta frase se convierte en el leit motiv de la película, y la define perfectamente. Pero antes del desenlace final, asistimos a una canónica historia de amores de ultratumba, ya que el protagonista se enamora de una mujer sin rostro emparedada en vida, a la que él consigue ver, esa parte del film, es simplemente gloriosa, dónde voces, necrofilia, irrealidad, autómatas y hasta una enana-sibila es clave en el giro argumental que sigue después.
La música, como no podía ser de otra forma, corre a cargo de Ennio Morricone, fantástica.


Os dejo con el tema Volti e fantasmi.

lunes, 27 de junio de 2022

Bandas sonoras míticas del cine (CIX)

En 1968 el director italiano Sergio Corbucci dirige Salario para matar, en la que se cuenta la historia de un mercenario de origen polaco al que da vida Franco Nero, Sergei Kowalski, que se vende al mejor postor. Llega a México durante la revolución de Pancho Villa y traba amistad con Paco Román (Tony Musante), un bandido sin escrúpulos que tiene trazas de patriota, todo esto durante los enfrentamientos entre los campesinos y las clases altas, ayudadas por el ejército. Para rodar esta película Corbucci buscó infinidad de localizaciones en Madrid y Almeríoa. En Madrid se rodaron escenas en Carabaña, Ciempozuelos, La Pedriza, Nuevo Baztán, Río Jarama, VIllamanta, Colmenar Viejo (Ermita de Nuestra Señora de los Remedios) y Manzanares el Real.
Precisamente en la Plaza de Toros de esta localidad (hoy desaparecida) se rodó la famosa escena final del duelo entre Paco Román, vestido de payaso, y "Ricitos" Curly (Jack Palance).
Es uno de los primeros títulos de lo que se denominó "zapata-western" y cuya banda sonora corrió cargo de Ennio Morricone, otra delicia del gran compositor italiano.


Os dejo con el tema L'Arena de dicha banda sonora.

domingo, 26 de junio de 2022

Elvis (2022)

Baz Luhrman ha sido el director australiano que ha dirigido Elvis, el primer biopic de calado que se hace sobre el rey del rock Elvis Presley, hubo varios intentos pero que se quedaron en agua de borrajas ciertamente. El cineasta acumula en su filmografía títulos como Romeo + Juliet (1996) Moulin Rouge! (2001) o el remake de El Gran Gastby (2013) entre otras, y está claro que si has visto esas películas, algo de ellas hay en esta, de manera detallista si se me apura. Es evidente que aquí ha habido presupuesto alto (85 millones de dólares), actores de mucho nivel, pero también mucho riesgo, y ahí hay un alto porcentaje de acierto, pero también cosas altamente mejorables, como poco a poco iré desgranando. Austin Butler fue el actor elegido para dar vida a Elvis, y la verdad sea dicha, el chico se lo ha currado, y es casi imperceptible la diferencia entre el original y él en algunos momentos, su caracterización es brutal, y los movimientos los calca, algo nada fácil. El gran icono masculino americano de la música del S. XX debía tener una película de importancia que reverenciase su figura, y no sé si esta lo es del todo, pero creo que si en una buena parte.


Lo primero que hay que decir, es que este repaso a la figura de Elvis se hace desde varios prismas, pero no tiene una narración normal, de hecho es el propio Coronel Parker quien la narra, ni va describiendo paso a paso su infancia, ni es estrictamente cronológica, ya que realmente se centra en momentos importantes o clave que van describiendo la figura del personaje en cuestión y que le marcan. Una de esas claves es la influencia en él de la música negra, algo que me parece básico y fundamental, y que Elvis nunca escondió, me parece especialmente tierna esa amistad con B. B. King por ejemplo, o como ya desde pequeño asistía casi furtivamente a convenciones de música negra que le marcaron. Como es lógico, el chispazo que provoca la versión de That' all right Mama grabada con Sun Records, se extiende como la pólvora y será el farsante (él mismo lo dice y no lo niega) del Coronel Parker, al que interpreta un soberbio Tom Hanks, quien atrape a ese diamante en bruto que tenía ante sus ojos. Es evidente que aquí el villano es Parker y la víctima Elvis, además su mánager fue acusado de malas prácticas financieras y también de tener mucha culpa en la muerte del chico de Tupelo en 1977 a los 42 años.


En el aspecto musical están algunas de las cosas mejorables del film. Es, desde mi punto de vista, un despropósito que no cuadra nada, meter temas (dos que yo recuerde) de onda rap y hip-hop trastocando claramente lo que te están contando referido a una época concreta donde esa música no sonaba. Que el director ha querido darle un aire moderno, pues muy bien, pero no pega., que venía de hacer Get down en 2016 (serie para Netflix) sobre el nacimiento del hip-hop, pues muy bien, pero eso aquí no tiene sitio. Hay un salto abismal cuando si suena la música negra de Little Richard por ejemplo y hasta Elvis alucina y dice que grabará su versión que él interpretaba. Por supuesto todo lo que significó Elvis con sus movimientos de cadera (perversos para le época) denotan a un personaje adelantado a su tiempo, y cuya franja que le toca vivir está desfasada y anticuada, ese puritanismo no iba con él. Por otro lado hay un excesivo uso de flashbacks en demasiados momentos, debería ser solo un recurso.

Cierto es que siempre se aprenden cosas, y esa faceta de manipulador y verdadero extorsionador de Elvis que hace el Coronel Parker, te hace comprender en muchos momentos ciertas situaciones que sucedieron con Presley como esas tantísimas noches tocando en el Hotel International de Las Vegas, que nunca tocara en el extranjero, todo tipo de manipulaciones a las que le sometía para actuaciones televisivas bochornosas y todas aquellas películas (muchas de las cuales se las podría haber ahorrado) que provocaron el estancamiento de un artista inigualable y el mejor intérprete que ha habido. Pienso, y esto es una opinión personal, que a Parker la música le daba igual y por eso actuaba así, no tenía ese amor necesario por ella. Hanks de hecho, parece replicar en cierto momento el papel de mánager mezquino del film The Wonders, pero claro aquí más exagerado y con una capa de maquillaje casi rozando lo grotesco.


Lo curioso de este film, es que el narrador de la película, el Coronel Parker, queda realmente mal y la lectura que interpreto es que tuvo mucha culpa de la caída del mito, por no decir una gran parte, todo tejido con artimañas realmente sucias y de ser un farsante muy sangrante. De la parte que mejor recuerdo me queda, son esas interpretaciones de Butler de momentos míticos en el Comeback Special, en el hotel de Las Vegas, o incluso en su última actuación (no parece diferenciarse del original) de 1977, ya en un estado muy lastimoso. La relación de Elvis con su familia y mujer también están bien explicadas, una madre que quería lo mejor para él, pero la bebida la mató, un padre pusilánime y sin ningún valor y una mujer que acabó harta de infidelidades y su adicción a las pastillas.

Os dejo con el tráiler del film.

jueves, 23 de junio de 2022

Escenas míticas del cine (CCXXXIV)

Como decía ayer, en 1993 Harold Ramis dirige Atrapado en el tiempo (Groundhog day), una estupenda comedia que a la vez es una reflexión sobre la vida y la forma en la que decidimos pasar por ella. La historia nos cuenta como Phil, al que da vida un magnífico Bill Murray, es el hombre del tiempo de una cadena de televisión, y como cada año viaja una vez más en febrero a Punxstawnwey a cubrir la información del Día de la Marmota. En el viaje de regreso, Phil y su equipo se ven sorprendidos por una tormenta de nieve que les obliga a regresar a la pequeña ciudad. A la mañana siguiente, el despertador suena como siempre a las 6 de la mañana con la sintonía musical del tema de Sonny & Cher, el mítico I got you babe de 1965, y al desperezarse y despertarse comprueba atónito que es el mismo día que el anterior, es decir, el Día de la Marmota, que se repite día tras día.
Es curioso como mucha gente vivimos algo muy parecido durante el confinamiento de la pandemia, te levantabas muchos días que se parecían al anterior...
En una de sus muchas escenas memorables, en su paseo matinal por el pueblo, Phil se encuentra con Ned (Stephen Tobolowsky), un vendedor de seguros bastante pesadete (como suelen serlo todos) que le intenta encasquetar un seguro (el que sea, vida, o lo que sea), y claro esa escena se repite un día tras otro y la actitud de Phil va cambiando hasta que acaba dándole un puñetazo al bueno de Ned.


Os dejo con la mítica escena.

miércoles, 22 de junio de 2022

Escenas míticas del cine (CCXXXIII)

En 1993 Harold Ramis dirige Atrapado en el tiempo (Groundhog day), una estupenda comedia que a la vez es una reflexión sobre la vida y la forma en la que decidimos pasar por ella. La historia nos cuenta como Phil, al que da vida un magnífico Bill Murray, es el hombre del tiempo de una cadena de televisión, y como cada año viaja una vez más en febrero a Punxstawnwey a cubrir la información del Día de la Marmota. En el viaje de regreso, Phil y su equipo se ven sorprendidos por una tormenta de nieve que les obliga a regresar a la pequeña ciudad. A la mañana siguiente, el despertador suena como siempre a las 6 de la mañana con la sintonía musical del tema de Sonny & Cher, el mítico I got you babe de 1965, y al desperezarse y despertarse comprueba atónito que es el mismo día que el anterior, es decir, el Día de la Marmota, que se repite día tras día.
Es curioso como mucha gente vivimos algo muy parecido durante el confinamiento de la pandemia, te levantabas muchos días que se parecían al anterior...


Os dejo con esa mítica escena donde Phil se da cuenta que todo es igual al día anterior por primera vez...

lunes, 20 de junio de 2022

Bandas sonoras míticas del cine (CVIII)

El director chileno Pedro Larraín dirige en 2021 el biopic Spencer, su particular acercamiento a la figura de Lady Di (de nombre real Diana Frances Spencer), fijándose en el retrato de la mujer que había detrás de la Princesa de Gales. Spencer explora la idea de que fue durante unas navidades, a principios de los años 90, cuando Diana tomó la decisión definitiva de separarse de su marido y alejarse de la familia real inglesa, un mundo en el que no terminaba de encajar. La realidad era más compleja aún, pero en esta muy buena radiografía de Larraín, destaca mucho la magnífica interpretación de Kristen Stewart. El drama tiene lugar durante tres días, en una de sus últimas vacaciones de Navidad en la Casa de Windsor, en su finca de Sandringham en Norfolk, Inglaterra.
La extraordinaria banda sonora corre a cargo del guitarrista de Radiohead Jonny Greenwood, y con melodías de piano y cuartetos de cuerda da en el punto clave de la historia.


Os dejo con el tema New currency.

jueves, 16 de junio de 2022

Escenas míticas del cine (CCXXXII)

En 1998 Gregory Hoblit dirige Fallen, un tremendo thriller de intriga y que genera bastante inquietud en su visionado. Nos cuenta la historia del detective John Hobbes, al que da vida Denzel Washington, que se hace famoso por atrapar al asesino en serie Edgar Reese (Elias Koteas) al que acaban ejecutando en la silla eléctrica. Hobbes piensa que muerto Reese se han acabado los asesinatos y los problemas, pero todo empieza a torcerse cuando toda la gente que conoce empieza a cantar la misma canción que Reese cantó durante su ejecución, la versión que hacían The Rolling Stones en 1964 del Time is on my side. Es entonces cuando Hobbes, a través de una ardua y dura investigación, se da cuenta de que quizás tras esos crímenes se encuentre el ángel caído Azazel, que fue condenado a vagar informe por la Tierra y toma los cuerpos de otras personas como huéspedes.
En la extraordinaria escena inicial, se ve como Reese muere en la silla eléctrica y antes canta Time is on my side hasta que es completamente chamuscado, excelente Elias Koteas.


Os dejo con la mítica escena.

domingo, 12 de junio de 2022

Escenas míticas del cine (CCXXXI)


Como decía días atrás, en el año 1982 el director Costa-Gavras dirige Desaparecido (Missing), un drama basado en hechos reales en el que Charles Horman (John Shea), un joven e idealista periodista norteamericano desaparece de su domicilio en Santiago de Chile tras el golpe de Estado del general Augusto Pinochet en 1973. Su mujer Joyce a la que da vida Sissy Spacek y su padre Ed Horman que interpreta Jack Lemmon se traslada allí desde Estados Unidos, e intentan averiguar su paradero, para lo que pasarán por una auténtica odisea recorriendo instituciones diplomáticas norteamericanas y tropezando con infinitas trabas burocráticas en medio del caos reinante. El problema de Charles es que era un joven que colaboraba con medios progresistas y alternativos y tanto el film como la investigación en la que se apoya apuntan que fue asesinado para ocultar la participación estadounidense en el golpe de Estado.
Costa-Gavras cuenta la historia con una sensibilidad especial y centra la mirada en la búsqueda del padre Ed, un hombre conservador, creyente (pertenece a la iglesia de la Ciencia Cristiana), empresario y absolutamente seguro del sistema y el estilo de vida americano. Con una sutilidad y delicadeza absoluta la película construye, con la ausencia del hijo, la historia de una relación paterno filial.
Para la banda sonora el director no dudó en llamar a su compatriota Vangelis, que venía de hacer Chariots of fire y Blade Runner en 1981 y 1982 respectivamente, dos joyas, dando aquí un armazón a esa historia sensible realmente impresionante.
En una escena mítica Ed va a ver a Peter Chernin (Robert Hitt), responsable de la parte económica de una fundación que se encarga de decirle la verdad ya que tiene contactos importantes, y le dice que su hijo fue ejecutado en el Estadio Nacional, algo que afecta profundamente al señor Horman que intenta ponerse en contacto con el informante. Posteriormente acude a la embajada de EEUU donde le dan la falsa esperanza de que su hijo vive todavía, mientras discute con el Embajador (Richard Venture).


Os dejo con la mítica escena.