Este es un blog sobre cine, de aquellas películas que me gustan y mi opinión sobre ellas.
sábado, 31 de agosto de 2024
Escenas míticas del cine (CCCLXIII)
viernes, 30 de agosto de 2024
Escenas míticas del cine (CCCLXII)
En una escena mítica Frank va a hablar con el Doctor Gruber (Lewis J. Stadlen) que va con prisa, pero consigue que puedan quedar otro día para su declaración que se antoja fundamental en el caso (él era claro con respecto a la negligencia médica que se cometió), y en el momento final cuando le acompaña al coche Galvin le pregunta "¿porqué hace usted esto?", a lo que Gruber contesta "Porque es lo justo, ¿no lo cree usted así?".
jueves, 29 de agosto de 2024
Bandas sonoras míticas del cine (CLXXXVIII)
miércoles, 28 de agosto de 2024
Escenas míticas del cine (CCCLXI)
Mad Max: Fury Road fue la cuarta entrega perpetrada por George Miller en 2015, de esta tremenda saga. Una película básica y visceral, que no sólo mantiene sino que eleva a la máxima potencia esas coordenadas referenciales de sus predecesoras, es decir, el apocalíptico y postnuclear futuro que nos presentaba. Australia es un país de locos geniales, pero el mejor de todos ellos es George Miller, que después de hacer esta película ya podía descansar tranquilo, pero como contaba ayer, con Furiosa ha vuelto a dar otra estacada y grande. Pero en Fury Road, bajo un brillantísimo despliegue de desguace motorizado, tubos de escape tuneados, V8 que corren que se las pelan y demás, construía un entramado de personajes profundos, motivaciones con sentido y, sí, cosas para pensar, porque allí había de todo, feminismo, misoginia e intento de priorizar una estirpe, todo ello mezclado en una montaña rusa de sensaciones, escenas trepidantes que no daban descanso al espectador y una puesta en escena, que era tan abrumadora que sólo cabe aplaudir al director por su esfuerzo incansable en llevar adelante el proyecto (con todos los problemas que hubo en el rodaje). Max (Tom Hardy) está aquí al borde la locura, atormentado por los recuerdos de ese pasado turbulento que le persigue, pero su manera de sobrevivir es ir solo por el mundo, aunque pronto encuentra enemigos implacables que le utilizan como bolsa de sangre. Sin embargo, se ve arrastrado a formar parte de un grupo que huye a través del desierto en un War Rig (tráiler formado por una cisterna doble, más una cabeza tuneada que tira de él) conducido por una Emperatriz de élite, Furiosa (Charlize Theron). Escapan de una Ciudadela tiranizada por Immortan Joe (Hugh Keays-Byrne), a quien han arrebatado algo irreemplazable, su sucesor. Desatado y enfurecido, Immortan Joe moviliza a todas sus bandas y decide emprender una persecución implacable a lo largo y ancho del desierto detrás de los rebeldes, donde se produce una guerra sin cuartel de altísimas revoluciones donde se producen momentos orgásmicos, que a mi particularmente me hicieron disfrutar como un niño con zapatos nuevos.
martes, 27 de agosto de 2024
Furiosa: A Mad Max Saga (2024)
Es innegable que Mad Max: Fury Road marcó un antes y un después en el cine de acción, y que por ese motivo quizás sea insuperable, pero este film y sus virtudes son muy valorables, teniendo en la dirección artística una de sus grandes aciertos, mientras que la trama gana interés con unos personajes carismáticos que evolucionan, a la vez que aparecen otros nuevos de peso. Las elipsis y los saltos temporales están bien aplicados. Nueve años después de aquella, esta precuela no es ni mejor ni peor ni hay que medirla en esos aspectos, pero si que su naturaleza es diferente, y sus aspiraciones al fin y al cabo también. Algo que une a las dos cintas inevitablemente es esa lucha por la supervivencia, la locura de aquellos que son capaces de seguir a un líder sin importarles la muerte y toda la gama de artefactos que se componen de cuádrigas con motos, motos con cuernos y calaveras, parapentes motorizados y con ventiladores, cisternas imponentes, etc.,
lunes, 26 de agosto de 2024
Escenas míticas del cine (CCCLX)
Como decía ayer, El club de la lucha es una película dirigida por David Fincher en 1999 y protagonizada por Edward Norton, Brad Pitt y Helena Bonham Carter en sus principales papeles. Se trata de una comedia negra y de mucha sátira, además de ser bastante salvaje y que vulnera y aplasta todas las convenciones narrativas y plásticas que encuentra a su paso, para burlarse de todos y de todo, y sobre todo de sí misma, ya que todo lo que toca lo convierte en carcajada furiosa. La historia nos habla de un joven perito de seguros que además es el narrador del film, interpretado por Edward Norton que está hastiado de su gris y monótona vida luchando contra el insomnio. En un viaje en avión conoce a un carismático vendedor de jabón llamado Tyler Durden (Brad Pitt) que sostiene una teoría muy particular: "el perfeccionismo es cosa de gentes débiles, sólo la autodestrucción hace que la vida merezca la pena". Ambos deciden, después de perder su casa en un incendio el narrador, fundar un club secreto de lucha, donde poder descargar sus frustraciones y su ira, y que tiene un éxito arrollador. Después de obtener bastante éxito con su club, Tyler, y dejando un poco al margen a su compañero y protagonista, emprende lo que llaman Proyecto Mayhem, un proyecto nutrido por un grupo numeroso de adeptos fieles que se organizan siguiendo las reglas anticapitalistas y anticorporativas de Tyler. Después de un accidente en el que acaba muriendo Bob, el amigo del protagonista, este decide poner final al Proyecto, aunque lo que descubre es que este se ha extendido por múltiples ciudades de Estados Unidos. En definitiva estamos ante un film, que sin querer desvelar su trama por mi parte, es transgresora, trepidante y muy arriesgada, un riesgo que creo tuvo éxito y sigue pasando muy bien el tiempo.
En una escena mítica, Tyler da un discurso en el que habla a todos a los que se han apuntado al club, en el que dice ver mucho potencial, pero desperdiciado, trabajando en gasolineras, sirviendo mesas o siendo esclavos oficinistas...
Os dejo con la mítica escena.
domingo, 25 de agosto de 2024
Escenas míticas del cine (CCCLIX)
Después de obtener bastante éxito con su club, Tyler, y dejando un poco al margen a su compañero y protagonista, emprende lo que llaman Proyecto Mayhem, un proyecto nutrido por un grupo numeroso de adeptos fieles que se organizan siguiendo las reglas anticapitalistas y anticorporativas de Tyler. Después de un accidente en el que acaba muriendo Bob, el amigo del protagonista, este decide poner final al Proyecto, aunque lo que descubre es que este se ha extendido por múltiples ciudades de Estados Unidos.