sábado, 30 de noviembre de 2019

Bandas sonoras míticas de películas (XXVI)


Después de intentos fallidos, Sergio Leone logró rodar Érase una vez en América, una fastuosa película cuya idea original estaba en seis horas de película, que se vio obligado el director a recortar a cuatro y media, y finalmente a tres y media para que se pudiera estrenar en salas en dos partes en 1984. Posiblemente sea una de las obras maestras del cine más conseguidas, y con un resultado más redondo, y eso que en los recortes que sufrió hay personajes que lo notan y sus historias quedan sin verse (la nueva versión parece que los recupera).
Una película que está ambientada en los años de la Ley Seca en New York, desde 1920 a 1933, pero no llega a ser un film de gangsters al uso, sino una visión personal del director sobre el género y su devoción por una época ya pasada del cine, el de las grandes superproducciones.
Se trata de un gran cuadro sobre la historia de Estados Unidos en esos años, y poco complaciente con el público, con personajes muy odiosos en su totalidad, además de lograr que el verdadero protagonista de todo fuera el tiempo.
David Aaronson, un pobre chaval judío conoce en los suburbios de Manhattan a Max, otro joven hebreo dispuesto a llegar lejos a toda costa y por cualquier método. Noodles (Robert de Niro) y Max (James Woods) hacen muy buena amistad y con otros amigos forman una banda que prospera a base de robos, y se convierten en mafiosos importantes.
Todo esto está narrado musicalmente por la maravillosa banda sonora de Ennio Morricone, viejo colaborador ya por entonces de Leone, una banda sonora de las primeras que compré original en su día.


Os dejo con el tema central del film.

viernes, 29 de noviembre de 2019

Escenas míticas del cine (CXII)


En 1965 David Lean dirige Doctor Zhivago, una memorable película basada en la novela de Boris Pasternak, maldita y en el ostracismo en Rusia durante 30 años, y que interpretan un espléndido Omar Shariff, Julie Christie y Geraldine Chaplin entre otros. Shariff da vida al Doctor Zhivago que es poeta, cirujano, marido y amante pero cuya vida queda trastornada por una época muy convulsa en Rusia, 1917, la revolución bolchevique, y la guerra civil que sigue a la revolución, que provocan conflictos en todas las familias. El drama de este hombre, en el que se centra el film, cuya lucha contínua por sobrevivir es épica, centra el metraje y también su vida amorosa, quizás con una disyuntiva entre no saber amar o amar demasiado.
En una escena mítica, en la estación ferroviaria de Moscú, miles de personas esperan al tren para salir de allí y marchar lejos. Zhivago y su familia consiguen plaza en el tren (donde sólo dejan entrar a 50 almas por vagón). Allí ya hay gente que viene de más lejos, "voluntarios", como el personaje que interpreta Klaus Kinski, esposado a la litera y clamando por su libertad.


Os dejo con la mítica escena.

jueves, 28 de noviembre de 2019

Negación (2019)


Beatriz Mbula y Helena M. Cabrera dirigen este corto donde un chico y una chica quedan por internet, algo muy habitual en la actualidad. Él le pregunta a ella que cual es su profesión, a lo que ella contesta que ponía actriz en el perfil. Pero el chico se queda un poco sorprendido ya que no hay muchas actrices de color en España, a lo que ella contesta de una manera un tanto irónica... no tiene desperdicio.
La duda que me queda es de esa gente que niega la realidad como forma de vida.... curioso al menos.

Os dejo con el minicorto.

miércoles, 27 de noviembre de 2019

Escenas míticas del cine (CXI)


Bernardo Bertolucci dirige en 1976 Novecento, ambientada, cómo no, en el principio del Siglo XX, en una pequeña parte de Italia. Como todo el mundo sabe, o debería saber, Italia es un país muy convulso política y socialmente, en la actualidad también y en esta película están expuestas muchas de las causas. Hablamos de una película muy larga, le sobra algo de metraje (excesivos 314 minutos) y en el que se explican muchas de las luchas sociales en aquel país, a través de un microcosmos, el de la región de Emilia, al norte, en el que nacen el mismo día el hijo de un terrateniente, Alfredo Berlinghieri (Robert De Niro) y el hijo de un bracero Olmo Dalcò (Gerard Depardieu), que serán amigos inseparables, aunque su relación se verá ensombrecida por diferentes actitudes frente al fascismo.
Hablamos de una tragicomedia con un extenso recorrido político y social y que ha entrado a formar parte de los clásicos del cine ya que está ajeno a modas, tecnologías, paso del tiempo, etc...


Os dejo con una escena mítica en la que Alfredo y Olmo se dicen verdades a la cara.

martes, 26 de noviembre de 2019

Escenas míticas del cine (CX)


En 1992 Clint Eastwood, que hasta ese momento no tenía el reconocimiento por su carrera de actor y mucho menos por la de director, hizo Sin Perdón, que revitalizó de manera increíble el western, aunque años antes con El Jinete Pálido ya tuvo un gran intento, pero en este trabajo confluyeron varias circunstancias que hicieron que fuera un éxito absoluto y que recibiera Oscars y premios de toda índole. Pero cuidado, estamos hablando de que Clint en ese momento llevaba ya dirigiendo películas desde 1971, ahí es nada, 21 años, y con una calidad muy buena. De hecho esto no fue más que un espaldarazo a su carrera, y desde entonces no ha dejado de hacer grandes films.
En este interpretaba a William Munny, que junto a Ned Logan (Morgan Freeman) vuelven a cabalgar juntos después de años, por una recompensa de 1000 dólares que unas prostitutas ofrecen por matar a dos tipos que acuchillaron a una de sus compañeras y la desfiguraron. El sheriff del pueblo en cuestión, de Big Whiskey, Little Bill Daggett (Gen Hackman) que no permite armas ni delincuentes en su ciudad, había indultado a esos dos hombres, a pesar de sus hechos.
Esa ayuda exterior que las mujeres piden, hará que William vuelva con su amigo Ned, recaiga en la bebida, y se convierta en el asesino implacable que fue, como se puede ver en la escena de venganza cuando entra en la taberna, por la muerte a manos del Sheriff de su amigo Ned y en la que suelta una de sus frases míticas: "todo el que quiera seguir con vida, será mejor que se largue".


Os dejo con la mítica escena.

lunes, 25 de noviembre de 2019

Mejores escenas cómicas del cine (LXXVI)


Mi película favorita cómica, sin duda es El Jovencito Frankestein, dirigida por Mel Brooks en 1974. Una de las comedias más disparatadas, delirantes, ingeniosas y divertidas de la historia del cine. Se trata de una de esas conjunciones donde todo funciona, y no sólo eso, sino que lo hace con un encanto especial, algo tocado con una varita mágica e irrepetible. Además y por si fuera poco, tiene la capacidad curativa de hacer olvidar problemas de la vida cotidiana, y te sientes completamente absorbido por la pantalla, en su hora y tres cuartos de duración.
Rodada en blanco y negro aposta, en ella, el joven doctor Frederick Frankestein (Gene Wilder), un neurocirujano norteamericano, ha huído siempre del estigma legado por su abuelo, quien creó años más tarde un monstruo. Ahí, es donde el guión perpetrado por Brooks y Wilder hace un desprejuiciado homenaje, que a la vez es parodia, y cómo no, revisión del mito cinematográfico, cuya creación era de Mary Shelley.
En una escena cómica bestial Herald (al que interpreta Gene Hackman...) es ciego y vive solo y recibe la visita del monstruo,con el que trata de ser hospitalario ofreciéndole sopa, pero al ser ciego lo echa de manera dubitativa y no en el cuenco, también le invita a beber vino y brindan... un brindis muy efusivo, quizás demasiado y también hay puro... que el ciego enciende de manera confusa... todas esas buenas intenciones llevadas a cabo con torpeza harán que el monstruo salga despavorido.


Os dejo con la tremenda escena cómica.

domingo, 24 de noviembre de 2019

Mejores escenas cómicas del cine (LXXV)


En 1916 Charles Chaplin, dentro de su enorme actividad, hizo un cortometraje mudo, el octavo para Mutual Films. El título de la película tuvo varias traducciones al español, entre las que están Charlot, Héroe del patín, Patinador, Como sobre ruedas o Sobre ruedas.
Él trabaja de camarero y tras unas divertidas escenas trabajando en un restaurante, Charlie se va a patinar durante su descanso para el almuerzo y empieza a organizar un desmadre con los demás patinadores, mientras todos se van cayendo a su alrededor muchas veces originado por él, provocando la carcajada a mandíbula batiente.


Os dejo con un fragmento de la mítica escena cómica.

sábado, 23 de noviembre de 2019

Amigas para siempre (2019)


Jesús Martínez Asencio dirige este mini corto en el que dos amigas, interpretadas por María Ortiz e Irene Álvarez, quedan para tomar un café. Una de ellas va a abrir el sobre del azucarillo y dice que pone en el mismo que si "una amistad dura más de siete años es para siempre" a lo que la otra responde que no llegarán, a partir de ahí empiezan las divergencias. Hoy en día todo es efímero, las amistades, las relaciones, vivimos en un mundo en el que todo pasa a velocidad de vértigo, como este corto...


Os dejo con el interesante mini corto.

viernes, 22 de noviembre de 2019

Ford v. Ferrari (2019)


James Mangold dirige este extraordinario biopic, Le Mans' 66 se ha titulado aquí, que tiene como gran virtud construir una gran película basada en dos pilares tremendos, como son las grandes actuaciones de Matt Damon y Christian Bale, además de reconstruir fielmente una de las rivalidades más fuertes de la historia de las carreras de coches, la que hubo entre Ford y Ferrari en los años 60, y que tuvo a la pista del circuito galo de Le Mans y su mítica prueba de las 24 horas como protagonista.
Ferrari llevaba años ganando esa mítica carrera, pero Enzo Ferrari tenía poca liquidez, por lo que Ford intenta comprar a la escuadra italiana, Enzo se niega y despide a sus emisarios, es entonces cuando Ford recluta a los mejores ingenieros, pilotos y mecánicos para hacer un coche que gane la mítica carrera.


Matt Damon encarna a Carroll Shelby, un tipo que fue piloto y ganó la mítica carrera, pero cuyos problemas de salud le obligaron a retirarse, a partir de ahí decide hacer coches y se convierte en un visionario automovilístico. Conseguirá, no sin reparos por parte de la empresa Ford, que su amigo y gran piloto, el británico Ken Miles, al que da vida Christian Bale, construya un coche desde cero para conseguir ganar esa carrera en Francia. Todo ese tipo de procesos son largos, y los resultados no suelen ser buenos al principio, pero la perseverancia de ambos y las gestiones de Shelby con Henry Ford II, hicieron que al final Miles llevara ese coche a competir de igual a igual con los Ferrari. 


Hay muchas veces que digo, que hay cintas excesivamente largas que con un recorte funcionarían mejor, aquí las dos horas y media están totalmente justificadas, ya que el proceso de construcción del bólido es la clave de todo, y por supuesto los riesgos que conlleva. Pero aparte, está la vida de Miles con su sufrida mujer y su hijo que le adora, y luego las personalidades digamos no muy simpáticas que había dentro de una gran empresa como Ford, donde su máximo responsable se rodeaba de personas poco llevaderas, por decirlo finamente.
Pero qué bien está centrado el film en la pasión que une a dos hombres como Shelby y Miles, que personalmente son bastante distintos y eso provoca roces, e incluso peleas.


Lee Iacocca era el responsable de la parte comercial de Ford, al que interpreta Jon Bernthal y cuyo papel al principio parece ser el antagónico de los dos protagonistas, pero cuyo relevo en el papel de villano lo toma a mitad de película Leo Beebe, al que da vida Josh Lucas y que quizás es demasiado arquetípico, aunque siempre debe haber uno.
Pero al final, todo son palos en las ruedas que van poniéndose en el camino, y que el dúo protagonista va salvando una y otra vez.
En definitiva Mangold consigue que el film se te pase volando, yo disfruté en mi butaca de manera increíble, además de que todas las recreaciones de las carreras, entrenamientos, primeros planos de seguimiento y más detalles, estén perfectamente hechos en este drama deportivo.


Os dejo con el tráiler del film.

sábado, 9 de noviembre de 2019

Doctor Sleep (2019)


Doctor sueño es un film dirigido por Mike Flanagan, que es una secuela del film El resplandor de 1980 que en su día dirigió Stanley Kubrick basado en la famosa novela de Stephen King, de 1977, tercer libro del creador de It, y la que le consolidó como líder en el género de terror. La secuela de ese libro se publicó en 2013, en la que el hijo de Jack Torrance (al que daba vida Jack Nicholson en la vieja cinta de Kubrick), Danny, ahora adulto (que ahora interpreta Ewan McGregor), usa su resplandor en un hospicio de personas moribundas, a los que él ayuda a morir plácidamente. Pero Danny, es un hombre al que le persigue su pasado, ya que sigue traumatizado, tiene problemas de ira y alcoholismo, asuntos heredados de su padre. El resurgimiento de sus habilidades psíquicas en la ciudad que le acoge, hará que una niña contacte con él, Abra Stone, de una potencia sensorial brutal, que está perseguida por un grupo de vampiros casi inmortales, que se alimentan del vapor liberado por personas que poseen el resplandor, mientras son torturados hasta la muerte.



Aquí lo que se produce, aún habiendo escuchado a su director que el centro de este película es el personaje de Danny cuando ya es mayor, es la unión de varias películas en una sola, la adaptación de King, la de Kubrick, su secuela y la propia del director Flanagan. La película en si, y esto es innegable, es un remake de la de 1980, de hecho la historia parte en su primera escena en ese año, con la presentación de los vampiros y sus fechorías. Pero aquí no sólo hay un homenaje a aquel film de Kubrick, sino que hay elementos de los que se ha apropiado y a otros (incluidos los actores) les han puesto otras caras, eso si, sin perder la fidelidad a la novela de King. No quiero decir con esto que este film se apodere de cosas de la cinta de Kubrick, pero desde luego hay algunas evidencias notables.


Pero cierto es que la atmósfera que invade esta película, partiendo de la base que es la misma, es bastante diferente, y los caminos a los que quiere llegar también. Que esta película esté dentro del género de terror es bastante lógico, Kubrick hizo una película de miedo sin ser un director encasillado en ese género, pero su pericia le hacía estar a gusto en cualquier estilo.
Lo que si es innegable es el respeto y las continuas reverencias a ese mítico film, con esos flashbacks y esa reinterpretación de momentos escogidos que te llevan de manera clara 39 años atrás. La parte psicodélica de la secta funesta y terrible de los vampiros, es la parte más novedosa y currada del film, aunque también la que atesora las secuencias más duras. Gran papel de Rebecca Ferguson como la líder de los vampiros.


Una de las mejores cosas de esta cinta está en su banda sonora de The Newton Brothers (y que abría la película de Kubrick), que se convierte en una presencia constante, incrementando las sensaciones y actualizando la seña de identidad musical que ya tenía la otra obra en su día. Es ahí, donde hay otro punto de paralelismo y conexión entre ambas películas, y sinceramente algunas de ellas son aportaciones que hubieran mejorado aún más a la antigua, pero que le da aún más valor a aquella por tener todas esas ideas ya en aquel momento, cosas de los genios como Stanley, un adelantado a su tiempo y un perfeccionista absoluto.


Es evidente que la vida de Danny Torrance ya de mayor merecía una película, y si había novela de por medio casi mejor, pero también es cierto que las referencias a la película de 1980 son muchas, tanto en escenarios utilizados, como en personajes y escenas recurrentes, quizás una adaptación más libre y con menos conexiones hubiera evitado comparaciones, pero más allá de todo eso, la cinta se me hizo larga, una tijera de veinte minutos no hubiera venido mal.

Os dejo con el tráiler.