domingo, 12 de junio de 2022

Escenas míticas del cine (CCXXXI)


Como decía días atrás, en el año 1982 el director Costa-Gavras dirige Desaparecido (Missing), un drama basado en hechos reales en el que Charles Horman (John Shea), un joven e idealista periodista norteamericano desaparece de su domicilio en Santiago de Chile tras el golpe de Estado del general Augusto Pinochet en 1973. Su mujer Joyce a la que da vida Sissy Spacek y su padre Ed Horman que interpreta Jack Lemmon se traslada allí desde Estados Unidos, e intentan averiguar su paradero, para lo que pasarán por una auténtica odisea recorriendo instituciones diplomáticas norteamericanas y tropezando con infinitas trabas burocráticas en medio del caos reinante. El problema de Charles es que era un joven que colaboraba con medios progresistas y alternativos y tanto el film como la investigación en la que se apoya apuntan que fue asesinado para ocultar la participación estadounidense en el golpe de Estado.
Costa-Gavras cuenta la historia con una sensibilidad especial y centra la mirada en la búsqueda del padre Ed, un hombre conservador, creyente (pertenece a la iglesia de la Ciencia Cristiana), empresario y absolutamente seguro del sistema y el estilo de vida americano. Con una sutilidad y delicadeza absoluta la película construye, con la ausencia del hijo, la historia de una relación paterno filial.
Para la banda sonora el director no dudó en llamar a su compatriota Vangelis, que venía de hacer Chariots of fire y Blade Runner en 1981 y 1982 respectivamente, dos joyas, dando aquí un armazón a esa historia sensible realmente impresionante.
En una escena mítica Ed va a ver a Peter Chernin (Robert Hitt), responsable de la parte económica de una fundación que se encarga de decirle la verdad ya que tiene contactos importantes, y le dice que su hijo fue ejecutado en el Estadio Nacional, algo que afecta profundamente al señor Horman que intenta ponerse en contacto con el informante. Posteriormente acude a la embajada de EEUU donde le dan la falsa esperanza de que su hijo vive todavía, mientras discute con el Embajador (Richard Venture).


Os dejo con la mítica escena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario