domingo, 22 de agosto de 2021

Escenas míticas del cine (CLXXXVII)

Alan Parker dirige en 1988 Arde Mississippi, un extraordinario film cuyos sucesos ocurren en 1964 y que tiene en los principales papeles a Gene Hackman y Willem Dafoe, además de una joven Frances McDormand. En ese año en un pueblo sureño del estado de Mississippi, donde el racismo es aún potente y está muy arraigado, el Ku Klux Klan reivindica de manera muy violenta la supremacía blanca, como por ejemplo cuando al principio del film tres activistas defensores de los derechos humanos desaparecen sin dejar rastro. Dos agentes del FBI de caracteres opuestos, se hacen cargo de la investigación, llamados Anderson (Gene Hackman) y Ward (Willem Dafoe).
El film, lleno de escenas violentas, apunta y analiza el odio racial buscando su origen e intenta comprender una reacción tan salvaje, hasta que los investigadores se van dando cuenta que el propio Sheriff y sus ayudantes también son racistas.
En una mítica escena, Anderson (Gene Hackman) va al bar donde suelen reunirse Deputy Pell (Brad Dourif) ayudante del Sheriff y Frank Bailey (Michael Rooker) uno de los tipos duros que está lleno de odio y racismo por dentro, además de otros palmeros. Anderson llega, pide una cerveza y entabla conversación con ellos hasta que estos, sobre todo Bailey, le deja claro agarrándole de la solapa que mataría a cualquier tipo de color si le dejaran, a lo que Anderson contraataca agarrándole de los testículos y apretando mientras deja claro que han venido al pueblo a acabar la investigación y no se van a ir.


Os dejo con la mítica escena.

2 comentarios:

  1. Una película entretenida, eficaz y cuyo mensaje, por desgracia, no ha perdido vigencia.

    Saludos.

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    1. Ricard: Pues si, hace poco la repasé y sigue por desgracia muy vigente, pero lo que me reí con esta escena...

      Saludos.

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