James Gunn dirige esta segunda entrega de una de las sagas de Marvel que más adeptos conquistó con su primera entrega, allá por 2014, que en su momento supuso una renovación del muestrario bastante grande. Llega la segunda parte, que ya no tiene el factor sorpresa de su lado, y con el éxito generado por la primera... unas expectativas descomunales. Y como pasa muchas veces, en este caso la secuela no supera a la original, y eso que tiene momentos en que está bien, pero abusa de ciertas cosas que luego explicaré.
Las situaciones familiares vertebran esta historia, y sin duda el sentido del humor sigue muy presente en todo el film, algo que claramente salva en muchos momentos a esta película. Pero, el primer gran problema que le veo a esta película, es que no destaca por nada en concreto, parece como un film de enlace entre otros, algo que tiene que estar pero no es imprescindible, sólo refuerza lazos entre los protagonistas.
Kurt Russell será Ego, el padre de Star Lord (Chris Pratt), y pronto se descubrirá como el villano, aunque al principio se cuida mucho de parecer un buen tipo. También esa tensión entre Star Lord y Rocket... uhhh...
Evidentemente Baby Groot (Vin Diesel le da voz en la versión original) es un personaje que embelesa y cae muy bien (el merchandasing se venderá como rosquillas imagino), pero su encaje con la música buenrrollera al principio mola, pero luego se abusa de ese tipo de temas tan molones, que llega al empalagamiento. Eso si, ayuda mucho a que funcione como film de entretenimiento el asunto de sus bailes y demás, unido al tema humorístico. Pero aquí lo que falla desde casi el principio, es la separación de muchos de los integrantes de los Guardianes, cuya fuerza es su unión, y que aunque intuyes por donde van los tiros en este film, tarda mucho en enfocar el asunto buenos-malos.
Hay que dejar una cosa también clara, los Guardianes lo son de la Galaxia entera, así reza su título, y en este film sólo están en dos partes del inmenso universo. Así, luchan por mantener unida a su nueva familia, mientras intentan resolver el misterio de los orígenes verdaderos de Peter Quill. Viejos rivales se convierte en nuevos aliados debido a las circunstancias, además de que queridos personajes de los cómics clásicos acuden en ayuda de este grupo de superhéroes, contibuyendo a la expansión del universo de Marvel. Cierto es que hay personajes secundarios que cogen peso, pero también aparecen otros que poco aportan.
Por otro lado hay algo de la química entre Russell y Pratt... auuu... no sé, algo me falla por ahí. El problema como concepto entero del film, es que hay partes que se me hacen algo sobrantes, las relaciones que se establecen entre determinados personajes se estancan, es decir, digamos que la parte del guión ha sufrido para que salga reforzado el entretenimiento, aunque a veces se piensa que a falta de un buen guión se tira del humor para salvar los muebles...
Pero en fin, que lo mismo es una percepción mía, pero salí del cine diciendo si, me lo he pasado bien y eso, pero no he salido dando palmas vaya... falta algo.
Os dejo con el tráiler.
Demasiado larga. La parte final se me hizo interminable.
ResponderEliminarRicard: Pues mira si, la verdad es que un poquito más corta y queda más apañada.
EliminarSaludos.