miércoles, 24 de febrero de 2021

Escenas míticas del cine (CLXIX)

Como decía ayer, en 1939 un trío de directores dirige Lo que el viento se llevó, Victor Fleming, George Cukor y Sam Wood, basada en el novela de Margaret Mitchell. La historia se desarrolla en Georgia, EEUU, en 1861, en la elegante mansión sureña de Tara donde viven Scarlett O'Hara a la que da vida Vivien Leigh, una joven muy bella, caprichosa y egoísta cuyo gran amor platónico es Ashley (Leslie Howard), pero él ya está prometido con su prima, una chica dulce y bondadosa llamada Melanie y a la que interpreta Olivia de Havilland. Es entonces cuando aparece Rhett Butler, en la última fiesta antes del estallido de la Guerra de Secesión que durará cuatro largos años. Scarlett le conoce y se queda prendada, pero ella desconoce que él es un vividor arrogante, aventurero, que sólo piensa en si mismo y que no tiene intención alguna de ir a la guerra, sus objetivos son hacerse rico y enamorar a Scarlett. El clímax de la película y una escena mítica de la historia del cine tiene como protagonista a Scarlett O'Hara y su explotación de algodón familiar llamada Tara, devastada por los horrores de la guerra. La magistral música de Steiner (a la que hice ayer referencia) nos presenta, mientras rompe el alba en Tara, a una denostada Scarlett, hambrienta que deambula sin rumbo por la otrora frondosa explotación agrícola, en busca de algo de comer. ve un tubérculo, lo arranca de cuajo, y sin limpiarlo no duda en comerlo. Al momento se da cuenta de su deshonrosa acción, de lo que el hambre puede llegar a despertar en el ser humano, reniega del acto y lanza la ya mítica proclama entre lloros: "A Dios pongo por testigo de que no lograrán aplastarme... Viviré por encima de todo esto y, cuando haya terminado, nunca volveré a saber lo que es hambre. ¡No! Ni yo ni ninguno de los míos. Aunque tenga que estafar, que ser ladrona o asesinar... A Dios pongo por testigo que jamás volveré a pasar hambre."


Os dejo con la mítica escena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario