lunes, 13 de enero de 2014

The men who stare at goats (2009)

Cartel del film


 
Ayer pude disfrutar por fin de ésta comedia disparatada y sin pretensiones, que en su día dejé escapar de las pantallas de cine, por motivos que no vienen al caso.
Grant Heslov, al que pocos o nadie recuerda, venía acompañado de sus mejores y más fiesteros colegas para adaptar la novela homónima de Jon Ronson, dispuestos a dar rienda suelta a esta surrealista sátira sobre las técnicas de control mental y programas de entrenamiento militar. Y desde luego, el resultado no pudo ser más bueno, aunque ciertas son las similitudes a obras menos serias de los Cohen, esta ida de olla, me parece realmente destacable.
 
 

George Clooney


 
Bob Wilton (Ewan McGregor), un periodista (al que ha abandonado su mujer) que ha sido enviado a Irak para hacer el reportaje de su vida, conoce allí a Lyn Cassidy (George Clooney), un soldado que asegura que ha sido adiestrado para usar su mente como arma, mientras viven disparatadas situaciones que ponen sus vidas en peligro. El creador de este revolucionario programa basado en la fuerza de la psicología, y que podría cambiar las artes de la guerra, fue Bill Django (Jeff Bridges), que reclutó a hombres con ciertos poderes telepáticos para crear el Ejército de la Nueva Tierra... conformado por Jedais al estilo Star Wars.



   George Clooney & Ewan McGregor




El film hace las delicias de los espectadores amantes de lo absurdo como yo, y estando basada en hechos y personajes reales en desequilibrio que viven dentro de un universo extremadamente coherente. Cierto es, que la parte final de la película es la que me decepciona un poco, ya que no está bien rematada, cuando durante todo el film no había parado de reír. Al final se diluye, y echo de menos una genialidad para terminar de cuadrarla.
Apuesta arriesgada a la que no le faltarán detractores, ya que mal entendida puede resultar una autentica majaderí­a, eso si.



Kevin Spacey, Jeff Bridges & George Clooney


 
Ambos, Clooney y McGregor, saben reírse de si mismos, uno demostrando saber desmarcarse (y no es la primera vez) del eterno papel de galán,y el otro burlándose de aquella parodia llamada Síndrome de Mark Hamill, dos actorazos, acompañados de otros dos que se sienten en su salsa y se divierten como nadie, Jeff Bridges, interpretando a El Nota 2, un personaje con múltiples paralelismos al que le diera tanta fama en El Gran Lebowski, con la diferencia del cambio de nombre, y esa trenza que jalona su aspecto, dando vida a un militar reconvertido a hippy new-age, con todo tipo de excentricidades, ridiculizando al ejército y la violencia.
La otra cara es Kevin Spacey, con el rol de malo muy malo, malísimo, dando cancha al villano por antonomasia, y que putea de manera inmisericorde tanto a Bridges como a Clooney.



Jeff Bridges hippie
 
 
En definitiva una película irregular, con altos y bajos, aunque yo estuve riendo buena parte de ella, con un guión tan absurdo que es coherente, y dejando en evidencia toda aquella rumorología sobre las actividades paranormales de la década de los 80. Se ríen a carcajadas del imbécil que se cree listo, se ponen en evidencia las miserias de la fe irracional, por parte de un reparto muy acertado, que además no recuerdo haber visto juntos en ningún otro film.

Os dejo con el principio de la película.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario