Manuel Martín Cuenca dirige El Autor, basada en la primera novela corta de Javier Cercas, que se titulaba El Móvil. Las anteriores películas de este director me parecen excelentes, tanto La flaqueza del bolchevique como Caníbal, aunque no ha estado nunca muy reconocido. La película ésta ambientada en la ciudad de Sevilla en 2017, cuenta la historia de Álvaro (interpretado por un impresionante Javier Gutiérrez), que es un abogado empleado en una notaria, cuya obsesión es escribir literatura de verdad, pero todo cambia cuando es su mujer Amanda (María León) quien triunfa en la escena literaria sevillana con una novela que para él es simple y popular.
Tras una serie de desencuentros, el matrimonio se separará y él toma la decisión de concentrarse en su propia obra, buscar su método de escritura, y a la vez asesorado por un profesor de escritura creativa, Juan (Antonio de la Torre), quien le recomienda escuchar y observar la realidad, pero que éste llevará mucho más allá, porque espiará a los vecinos grabando sus conversaciones, lo que le servirá de guión de su libro. Esos talleres literarios serán el acicate para que su vida se centre solo en escribir. El problema radica en que Álvaro se va metiendo en una espiral muy peligrosa, y a la vez que se mete absolutamente a fondo con la novela que le devora, va perdiendo los escrúpulos, manipula a la gente y les engaña con vistas al argumento de su novela.
Pero en este film, no solo hay una adaptación extraordinaria de la novela, sino también una maravillosa presentación de la historia, es decir, la puesta en escena, con un uso exquisito de los interiores del bloque donde se desarrolla casi toda la cinta. Tanto en las maneras y formas en que Álvaro rompe su bloqueo para escribir, como en el teatro de sombras que se refleja en la pared del patio interior con las discusiones de sus vecinos, esa decoración digamos escasa y mínima de su apartamento, que se asemeja a las páginas en blanco de una novela que le cuesta horrores empezar, la falta de ideas, y el corrompimiento de su manera de ser, que le llevará a conocer todas las miserias de sus vecinos a través de sus escuchas furtivas.
Todo esto va mutando al protagonista, al que borda Javier Gutiérrez en una actuación memorable, en un ser manipulador, egocéntrico y con tintes muy psicópatas, no sabiendo muchas veces separar realidad de ficción.
Además asistimos a una mezcla de estilos muy curiosa, ya que este film tiene tintes de comedia (de parodia en muchas ocasiones), dramáticos, incluso de thriller, no adoleciendo de falta de ritmo y consiguiendo mantener en el espectador la atención.
El resto de secundarios están perfectos, tanto Antonio de la Torre en un registro hasta ahora poco tratado está fantástico, María León, en sus pocas apariciones, muy bien en el papel de una mujer desconcertada por la actitud de su ex-pareja, etc...
Mucho me equivocaría si no le dan el Goya a Javier Gutiérrez por este papel, que son de esos que marcan una carrera.
Os dejo con el tráiler del film.
Tengo muchas ganas de pasar por la sala a ver esta película.
ResponderEliminarEste hombre se esta labrando una carrera llena de títulos increíbles, al igual que La Torre.
Un saludo
Victor: Merece la pena, ya te lo digo, la actuación de Javier Gutiérrez es de Goya como digo, pero la de Antonio de La Torre no le va a la zaga.
EliminarSaludos.