En 1987, Tony Scott (hermano de Ridley Scott, recientemente fallecido) dirigió la segunda parte de esta saga, dónde Eddie Murphy volvió a encarnar al detective Axel Foley, acompañado de los detectives Billy Rosewood (Judge Reinhold) y John Taggert (John Ashton).
En la escena a la que me refiero, los 3 van a ver al contable Sidney Bernstein (Gilbert Gottfried) que lleva las cuentas del ladrón de bancos, joyerías, etc., al que persiguen.
Ellos se hacen pasar por policías de tráfico y acusan al contable de tener 25 multas de tráfico sin pagar, a lo que responde que es el coche de su mujer (momento tremendo) y el posterior chantaje que ejecuta para librarse de pagar las multas... antológico.
Disfrutad de la escena.
Escena antológica donde las haya.
ResponderEliminarGrijaldo: Bien que lo sabes, lo que me he reído yo con esta escena, amigo.
EliminarUn abrazo.