lunes, 13 de julio de 2015

Love and Mercy (2014)

Cartel del film

Bill Pohlad dirige el biopic sobre la figura de Brian Wilson, que lleva por título Love and mercy, un tema de su primer disco en solitario de 1988. Encarnan en dos épocas distintas de su vida al genio, por un lado Paul Dano en los años 60, en una memorable actuación bajo mi punto de vista, y John Cusack en la parte más complicada, en su madurez, también a un gran nivel.
Los biopics suelen tener aspectos acertados y otros no tanto, en esta caso hay partes especialmente conseguidas, sin embargo la estructura del film me parece algo inconclusa, ya que se mezclan dos épocas de la vida del artista distintas seguidas y mezcladas, y aunque se entienden perfectamente, ralentizan un poco la narrativa y el ritmo de la película.




Pero es innegable que se trata de un biopic atípico, porque también el personaje en el que se centra es la mar de atípico. Eso si, por fin la vida de Brian Wilson ha sido llevada al cine como merece. Hablamos de un músico genial y complejo, aquel que con sus hermanos Carl y Dennis y el primo de ellos Mike Love formaban los Beach Boys, cuya juventud creativa y autodestructiva está muy bien hilada y descrita. Luego la parte de caída a los infiernos, la madura y redentora cierra el círculo, además de cumplir completamente la función de mostrarnos todo. Pero la compenetración entre Dano y Cusack a pesar de no compartir un sólo plano en pantalla es magnífica, algo muy loable por parte del director.




El inicio de la banda, su rollo playero, y el abandono de las giras por parte de Brian para centrarse en componer Pet Sounds, su gran obra maestra que quería ser la respuesta al Rubber Soul de los Beatles (y desde luego lo fue) pero alejado de la banda, es una parte sensacional del film, donde Dano se sale, pero también son los años de los coqueteos con las drogas, y donde sus problemas mentales eclosionaron y le incapacitaron para trabajar. Los problemas con su padre que le pegaba y le dejó medio sordo, su incomprensión a la obra de Brian, y los continuos rifi-rafes con Mike Love que no entendía la evolución musical del genio quedan perfectamente plasmadas. Impagables los momentos de creación de Pet Sounds, y como músicos muy baqueteados de estudio admiran la clase de Brian, verle componer, dirigir la orquesta o cantar las partes vocales con el grupo es impresionante y te separa claramente la línea entre película y documental. También están muy bien reflejadas las tensiones en la grabación de Smiley Smile, y el alejamiento de la banda del propio Brian.



Por contra, los años ochenta, en los que John Cusack interpreta a Brian, están marcados por su muy tóxica relación con su terapeuta Eugene Landy (Paul Giamatti). La redención o misericordia es el eje de esa trama temporal. La búsqueda del amor, de una guapísima mujer (ex-modelo), Melinda Ledbetter, que le vende un coche y de la que se enamora, interpretada por Elisabteh Banks, se contraponen con los intentos de abandonar su pasado que le persigue, y que de manera infernal encarna su terapeuta que le tiene enjaulado y desquiciado. Gracias a ella recuperaría su dignidad y sería su mujer (segunda esposa).




En definitiva un muy interesante biopic, que para todos aquellos que somos fans de los Beach Boys y de Brian en concreto, es imprescindible, pero que como película en si está realmente conseguida.

Os dejo con el tráiler del film.


2 comentarios:

  1. Brillante e inquietante peli, ese terapeuta...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jordim: Muy bienvenido a mi espacio de cine, debate y humor.
      Ese terapeuta que le jodía la vida.

      Saludos.

      Eliminar