domingo, 14 de junio de 2020

Escenas míticas del cine (CXXXVI)


En 1995 Michael Mann dirige Heat, una película cuyo mayor reclamo sería ver por primera vez juntos en rodaje y escenas a Al Pacino y Robert de Niro, que coincidieron en El Padrino II en el reparto, pero no grabaron juntos. Esta es la primera película de la trilogía urbanita de Mann que luego completaría con Collateral y Corrupción en Miami (el film).
Aquí Neil McCauley (Robert de Niro) es un experto ladrón cuya filosofía consiste en vivir sin ataduras ni vínculos que puedan constituir obstáculos, si las cosas se complican. Su banda la forman criminales profesionales muy cualificados, que impresionan al detective Vincent Hanna (Al Pacino), un hombre obsesionado con su trabajo que incluso llega a poner en riesgo su vida sentimental.
En una gran escena el teniente Hanna intercepta en la autopista el coche de McCauley, y este le invita a un café sabiendo quien es al dedillo, que el ladrón acepta. La conversación transcurre tranquilamente como si fueran dos amigos que hablan desde lo personal a lo profesional, teniendo un profundo respeto el uno por el otro, porque son los mejores en lo suyo, aunque ambos estén a distintos lados de la ley, dos caras de la misma moneda. Pero claro, ambos dejan claro también, que no les temblará el pulso llegado el momento.


Os dejo con la mítica escena.

2 comentarios:

  1. Que tal Savoy!
    No hace mucho que he vuelto a verla y me sigue pareciendo magnifica. Creo que son ese tipo de películas donde pillas a un buen puñado de actores en su estado de gracia.
    Saludos!

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    Respuestas
    1. Fran: Estoy completamente de acuerdo amigo, es una película que pasa muy bien el tiempo, de hecho las tres de la trilogía urbanita de Michael Mann son magníficas.

      Saludos!

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