jueves, 28 de febrero de 2019

Escenas míticas del cine (XCI)


Sylvester Stallone es un caso casi único en el mundo del cine. Su primer guión fue llevado a la pantalla en 1976, Rocky, dirigido por John G. Avildsen, una crítica al sueño americano, ese "American way of life" vestido de alabanza. A lo largo de la historia, ya se habían hecho películas sobre boxeo en el cine, donde el denominador común son historias de lucha y superación personal, con personajes de vidas inestables que han hecho de este deporte, un vehículo ideal para reorientar sus vidas hacia algo más próspero.
Rocky Balboa es un boxeador de origen italiano, demasiado mayor para lograr ya nada y medio retirado, ya que es un fracasado, y se le tiene por un sonado que malvive con combates esporádicos que le da para vivir a duras penas, además de trabajar cobrando deudas para un prestamista llamado Gazzo (Joe Spinell), mientras los chicos del barrio se ríen de él y sus ridículos discursos. Su mejor amigo es Paulie (Burt Young), un borracho que vive pegado a una botella de four roses y trabaja en unos almacenes de carne, cuya hermana Adrian (Talia Shire) es el amor platónico de Rocky. Pero América da oportunidades hasta al mayor tarugo, o al mayor defenestrado, y es por un capricho del destino que a Rocky se le presenta la oportunidad de pelear con el campeón mundial de los pesos pesados, Apollo Creed (Carl Weathers) y optar al título. Al principio Rocky piensa en que sólo le reclaman para ser sparring del campeón, pero le dejan claro que no, que va a pelear y es la oportunidad de su vida, ese tren que sólo pasa una vez en la vida. Es por esto, que Rocky cambiará su vida y se entrenará hasta la extenuación para aprovechar dicha oportunidad. Es ahí, donde la escena de él entrenando por las calles de Filadelfia con la famosa música de Bill Conti se hace inolvidable y mítica.


Os dejo con la mítica escena de Rocky corriendo y entrenando y alzando los brazos al final.

6 comentarios:

  1. Historia del cine, las secuelas ya son otra cosa, pero esta es una maravilla.
    Un saludo

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    1. Victor: Esta escena es imborrable y la tenemos muchos marcado a fuego en las retinas, el triunfo del humilde.

      Saludos.

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  2. Que tal Savoy!
    Creo que ha ido ganando con el paso del tiempo, a mi desde luego me parece magnifica. Por cierto, al hilo de esa inolvidable escena, hace bastantes años mis cuñados (a mediados de los 90) en un viaje por Estados Unidos visitaron Filadelfia, resulta que uno de esos tours en autobus el conductor paro y de repente comenzo a sonar la canción de la pelicula, el personal salio a toda leche del autobus y comenzaron a subir escaleras arriba, mis cuñados no sabian nada del tema y se quedaron flipando...jeje
    Venga, feliz finde!

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    1. Fran: En efecto amigo, para mi ya era buena, pero con el paso de los años se ha hecho mítica. Pues mira, esa anécdota que cuentas me parece fantástica, menudo homenaje estupendo y además que atrae el turismo de aquella ciudad.

      Saludos y feliz finde.

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  3. Pues sí que es mítica.
    Recuerdo que mi primo, luego de ver la película juntos, estuvo una semana corriendo y tirando piñas al aire, levantando los brazos, y cargando ladrillos...
    claro, era un poco de emocionarse. Luego de ver Día de la Independencia estuvo una semana mirando el cielo, ja!
    Gratos recuerdos me has traído.

    Abrazo!

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    1. Frodo: Je je je, gran hombre tu primo sin lugar a dudas, hay ciertas edades críticas donde agarramos ídolos y los imitamos.
      Felicítale de mi parte.
      Esta película es inolvidable.

      Abrazos.

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